Tras conocerse en Italia, ahora se instalaron en Perú, Seferi y su novia formaron una familia dentro del territorio Peruano dónde ahora cumplió el sueño a su amada de tener una piscina, está idea nació de su primogénito que les dijo construir una piscina, puesto que todas se encontraban muy lejos de su vivienda. Por lo tanto, en el 2000, Seferi tomó una decisión que en un futuro, alegraría a cientos de personas.
En medio de los cerros de Villa María del Triunfo, una amplia fuente de agua combina su color celeste con el verde de las lomas. Se trata de la «Piscina de los muertos» , denominada coloquialmente así por situarse cerca al cementerio Nueva Esperanza. Su creación, sin embargo, está muy alejada de cuestiones nefastas. Se debe, en realidad, a una historia de amor que nació en Italia. En dicho país, el yugoslavo Dzevat Seferi conoció a una ciudadana peruana de quien se enamoró.
En la actualidad, la piscina luce rodeada de una bella arquitectura. Cuenta con un restaurante y espacios comunes. A pocos meses de iniciar el verano, Seferi anuncia su reapertura e invita a todos los ciudadanos a pasar un día de diversión acuática.