El burgomaestre Aldo Mariños explicó que su cambio de decisión se debe a que los ronderos que lo acompañaban fueron agredidos por manifestantes la noche del 12 de octubre, al salir de la reunión con José Jerí.
El alcalde de Pataz, Aldo Mariños, informó que no participará de la manifestación del 15 de octubre pese a que, anteriormente, había asegurado que lo haría.
Según explicó en un video en sus redes sociales, su cambio de decisión se debe a que los ronderos que lo acompañaban fueron agredidos el último 12 de octubre. Esa noche, tras la reunión con el presidente José Jerí, el burgomaestre y quienes integraban su comitiva fueron rechazados por decenas de ciudadanos en la Plaza San Martín, quienes los acusaban de «traidores» y «vendidos».
«No me gusta la violencia. La rechazo en todos sus extremos. La actitud que han asumido algunos jóvenes, lo rechazo. Me comentan los ronderos que han sido agredidos por lo que esa actitud me aleja de ustedes. No asistiré este miércoles 15 a la marcha que ustedes están convocando«, dijo.
«Si realmente queremos construir un nuevo Perú, si queremos entendernos tiene que ser en paz», agregó.
Asimismo, precisó que si los acuerdos de la mesa de diálogo no se cumplen, irá a «todas las regiones del país» a pedir que «se vayan todos».
De convocar a cientos de personas a ser rechazado
El anuncio generó cuestionamientos en redes sociales, pues inicialmente Mariños fue visto como un aliado de las manifestaciones contra el nuevo gobierno.
Con el objetivo de exigir obras para la provincia que lidera, se trasladó de Pataz a Lima a pie, en un acto de protesta que denominó la «marcha de sacrificio». Tras más de un mes llegó a la capital y fue recibido por cientos de personas que se sumaron a su medida y lo acompañaron a recorrer las calles.
El apoyo fue masivo y generó cobertura mediática seguida de apoyo en las redes sociales. En las imágenes captadas por La República se observa como decenas de personas acompañaban al alcalde, quien exigió una mesa de diálogo con el presidente y aseguró que se sumaría a la marcha convocada para el 15 de octubre por la Generación Z.



